Tuesday, April 07, 2009

FUJIMORI: 2032


Hoy se dictó la sentencia más importante en la historia de nuestro país. Hoy se condenó a veinticinco años a un ex presidente, a un mandatario que usó y abusó de su poder omnímodo, a un tipo cobarde que destruyó cualquier vestigio de institucionalidad existente en nuestro país, que cometió sin lugar a dudas crímenes de lesa humanidad.

Antes de dictarse la sentencia (y después de dictarse ésta) se ha dicho mucho sobre el legado fujimorista en la historia de nuestro país. Es cierto, nadie puede negar los grandes avances que tuvimos, después de haber sufrido esos infaustos años ochenta. Claro, tampoco debemos olvidar que si bien en los años noventa se avanzó en muchos aspectos, también hubo muchos retrocesos. Si bien nos acercamos al progreso en términos económicos, en los aspectos sociales y jurídicos nos hundimos en la más sucia de las cloacas. No caigamos pues en el juego de considerar que Fujimori fue un gran presidente, porque ciertamente estuvo muy lejos de serlo.

Mucho también se ha hablado de “juicio político” o “juicio mediático” o de la “venganza de los caviares”. Primero, el juicio ha sido impecable, por lo que debe ser dejado de lado cualquier cuestionamiento a la independencia o calidad de los vocales o de las garantías procesales que tuvo el inculpado.

¿Y de qué presiones políticas se habla? ¿Acaso el fujimorismo no está aliado con el poder político vigente? ¿Acaso no dicen que los “caviares” no representan a nadie? ¿De qué presiones hablamos, de qué venganza, de qué persecución? ¿Tal vez se refieran acaso a lo sufrido por Gorriti o Dyer cuando fueron secuestrados? ¿Tal vez hablan de las constantes injurias que sufrieron los familiares de los desaparecidos de La Cantuta y los muertos de Barrios Altos, incluido un niño? ¿Tal vez se refieran a todas las atrocidades cometidas en la década de los noventa? ¿Se referirán a ese tipo de persecución y venganza?

Igualmente, la prensa o los medios de comunicación han mostrado rostros amables o hasta simpatizantes a favor del reo y de su familia. Basta pues leer a De Althaus o Mariátegui, revisar pasquines tales como “La Razón” o “Expreso”, oír en la radio cualquier programa de RPP en el que aparezca Raúl Vargas, ver a Bayly o nuevamente a De Althaus, o las entrevistas siempre complacientes a los representantes del fujimorismo, entre otras perlas. Así, de haber existido presión mediática, ésta vino de los sectores naranjas y su prensa afín. La mención a un “juicio mediático” suena a burla, viniendo sobre todo de las bocas de aquellos que no dudaron un segundo en comprar conciencias y líneas editoriales, o en poner en oferta las suyas.

Los argumentos para la absolución de Fujimori tuvieron poco de jurídicos, y pretendieron señalar que como éste realizó labores favorables para el Perú, cualquier “error” cometido debía ser automáticamente perdonado. Con ello, tácitamente se admite la culpabilidad del reo, pero se apela a las partes positivas de su gobierno, a efectos de soslayar o ignorar la importante y terrible parte negativa. Así, quienes hablaban de juicio político son los primeros en utilizar argumentos políticos para obtener un resultado favorable. Pero, ¿qué esperamos?, el fujimorismo nunca se ha caracterizado por la coherencia.

Se habla también de “excesos necesarios” o “costos de la guerra” o que “había que atacarlos como ellos nos atacaron a nosotros”. ¿Es un costo de guerra la muerte de un niño inocente? ¿Quizá se justificaba la muerte de personas que festejaban sin tener vínculo alguno con organizaciones terroristas? ¿Es un “error” la muerte premeditada de jóvenes que descansaban después de un día de universidad? ¿Era realmente necesario? ¿Se puede poner el Estado al mismo nivel que los criminales que combate y cometer los mismos excesos que condena? Los que dicen tales barbaridades carecen de la empatía que todo ser humano debería tener, o simplemente no les interesa que sus propios hijos, padres o hermanos mueran por un “bien mayor”, o no son mejores que toda la lacra terrorista que atacó a nuestro país.

Lo que sigue es ciertamente complicado. Se viene la apelación, las verdaderas presiones políticas y mediáticas. Se aproxima la campaña por la presidencia (¿o por el indulto de su padre?) de Keiko Fujimori (que tendría que explicar cómo pagó sus estudios y la razón por la cual permitió tantos maltratos a su madre), las voces feroces de los canallas de siempre, la genuflexión habitual de la mayoría de la prensa, la amnesia colectiva que sufrimos los peruanos, el apoyo de los sectores más conservadores del Perú (incluida la iglesia católica y las fuerzas armadas y policiales) y los grupos de poder económico tan comprometidos con su bolsillo pero tan poco con el desarrollo del país. La lucha por un país mejor no ha culminado, recién empieza y será muy dura de ahora en adelante.

Hoy ha sido un día para la historia, un día para estar orgullosos. Hoy, el sueño que algunos tenemos de un país justo e igualitario parece estar un poco más cercano. Hoy se ha probado que, a pesar de vivir en el país de los tristes imposibles, la justicia se puede y debe imponer. Y donde nadie, absolutamente nadie, debe estar por encima de la ley. Hoy es un día hermoso, es un día de justicia.


Jorge Orlando Ágreda Aliaga

4 comments:

JARANOVICH said...

Ahora que se pudra en cana!

Yuhonter said...

Saludos compatriotas.
Quiero desde mis cuarteles de invierno manifestar mi punto de vista sobre este hecho historico y que sin lugar a duda pone a nuestro pais como ejemplo para toda america latina y las futuras generaciones que desde la epoca de cristo, hasta hoy y muy posiblemente los siguientes 50 años siempre hacer lo correcto está penado, ahora somos ejemplo reciclado para el siglo XXI de como acusar, perseguir y crucificar a hombres q se atreven a representar cambios, sigue mas vigente que nunca, nuestro pais de la mano de Poncio San Martin Pilatos nos a restregado en la cara, que solo valiendose de dichos, supuestos y claro mucha sed de venganza insana se puede condenar a quien le de la gana a los poderosos del pais, osea, queridos conciudadanos de Perusalen ni pensar nunca atreverse a cambiar a los jueces corruptos de nuestros pueblos, a los presidentes ladrones de nuestros barrios, a las malas dirigentes ladronzuelas del vaso de leche; y menos siquiera se les ocurra delirar con denunciar a un narcotraficante, pues ya vimos la pena de acabar con las lacras q enferman a nuestro pueblo son 25 años de prision; esto significa cuando unos tiene 70 años cadena perpetua y mas aun significa la pena de muerte. Salgan a las calles y parece q estamos en Jerusalen todos vapulean, se alegran, saltan, gritan, lloran de emocion, al fin alcanzaron justicia, je je pobres tontos engañados, no se dan cuenta q tras todo esto solo hay un hombre q no es politico, q no actua con la intriga y astucia q debe tener todo politico, un hombre q ante todo tenia un sentimiento honesto de sacar al Peru del infierno en el q estabamos, un hombre q no tenia complejos de superioridad y podia una noche dormir en las alturas de Huarocondo (4000msnm) y otra noche en palacio.
En fin parece q nuestra ruin naturaleza humana siempre nos llevara por estos senderos de la injusticia, y bueno cuando el hombre muera recien saldra el cobarde corazon justo q todos tenemos muy en el fondo e igualmente lloraran gritaran q fue el mejor presidente, pero el ya no podra oirnos, se ira con la profunda tristeza q el pueblo peruano es ingrato.
Por otro lado a los defensores de las victimas de barrios altos y la cantuta, es cierto nadie, por mas desperdicio y peligro social q represente puede ser asesinado, q mas prueba de esto q Abimael esta vivo no? y que paso ahi, fallo la estrategia asesina del gobierno del Ingeniero?.
Lamento decirlo pero esas victimas tambien fueron victimarias, fueron mentes confundidas en euforias terroristas, ellos lo saben en sus tumbas y los familiares tambien los saben en la soledad de su conciencia y los agentes de ineligencia lo sabian en carne propia, pues para ellos cada dia era incierto, luchaban contra un enemigo cobarde q no se identificabao, un enemigo que basaba su estategia en el puñal por atras, por la noche, un enemigo q no se exponia como nuestros militares y poicias con su uniforme q era como ofrecerse para ser blancos moviles.
Dentro de todo esto mis queridos conciudadanos murio mucha gente inocente, muchos niños vieron morir frente a ellos a sus padres por no apoyar al movimiento terrorista, muchos soldados vieron morir a sus compañeros desmembrados frente a ellos y solo mantenidos con vida para el placer del estas mentes siniestras y malevolas, TU q ahora escribes con autoridad autoproclamada con tu bandera defensora de derechos humanos, crees q estas en el cielo? lloraste un solo dia por esto q paso en nuestro pais, te pusiste en la situacion de estar en medio de esta guerra y no saber q hacer, a quien pedir auxilio o simplemente pedir la muerte q era mejor q ver lo q vieron los ojos q hoy lloran en sus tumbas cuando saben q el unico hombre q se atrevio a enfrentar y eliminar a este demonio repartidor de muerte q fue Fujimori hoy esta condenado.
Para todos los literatos escribientes en este web, no pretendo cambiar sus opiniones ni sus posturas, solo reclamarles un poco mas de amplitud al evaluar situaciones, un poco mas de analisis profundo y con animo justiciero, y si tras esto su conclusion es q efectivamnete estan en lo correcto adelante, lo bueno es q actuaran con la conviccion de que lo hacen por justicia, no por ignorancia, arrogancia o venganza.
Atte.
Ing. Raul Lovon

Jorge Ágreda said...

Yuhonter:

De mi parte, jamás desearía cambiar tus ideas, sólo te pongo algunos puntos para tu reflexión.

1. El niño de ocho años muerto en Barrios Altos, ¿era un victimario, fue una mente confundida con euforias terroristas? Decir eso es una estupidez propia de un miserable infeliz.

2. Mi padre y mi tío fueron militares y estuvieron en Ayacucho en la época de la guerra (inclusive yo, a los 7 años pasé una temporada en 1988), y conocí a algunas personas que fallecieron por la barbarie terrorista. Así que sí, conocí y sufrí por ese terror. Justamente por eso, no concibo que el Estado (que está para proteger a todos los ciudadanos) incurra en las mismas barbaridades de aquellos a los que combate desde la ley (y más aún, cuando la guerra sucia no era necesaria).

3. Fujimori, ese mismo que se refugiaba en el SIN, ese mismo que fugó y renunció por fax, ese mismo que torturó a su mujer (y sobre lo cual sus hijos no dijeron ni pío), ese señor es un cobarde. Así de claro, y así de simple. Si lo quieres endiosar, estás en tu derecho. De mi parte, he hecho un análisis de todo lo que ha pasado en mi país, y sólo puedo decir que el Perú ha sobrevido no gracias a Fujimori, sino a pesar de él.


Lo importante de tu texto es que nos muestras lo que la peor calaña fujimorista realmente piensa. Hay quienes honestamente creen que Fujimori es inocente (contra ellos no se puede decir mayor cosa y, además, son una minoría), pero hay otros (como tú) que saben que es culpable, y a pesar de eso querían su absolución (porque consideran que las vidas perdidas no valen nada, porque no son las suyas, claro está). Eso, pues, es ser tan miserable como aquel que defienden, eso nos demuestra que en realidad estos señores son capaces de cualquier cosa sin que se les sonroje el rostro.

Y luego, por favor, no digas que te insulto, ya que el primero que ha usado epítetos altisonantes has sido tú.

Un disgusto y un asco, señor fujimorista.

Anonymous said...

"¿ni pensar nunca atreverse a cambiar a los jueces corruptos de nuestros pueblos, a los presidentes ladrones de nuestros barrios, a las malas dirigentes ladronzuelas del vaso de leche; y menos siquiera se les ocurra delirar con denunciar a un narcotraficante?"... Oe, yuhonter, no te pases, pues, si Fuji fue el más grande corruptor del poder judicial, el presi que más robó (recuerda que le pasó 15 millones a Vladi como bono de despedida y que se llevó el billete en maletas), del vaso de leche ni hablar, y su siamés le cobraba cupos a los narcos para que sigan operando.. Encima tienes la concha ce decir que "ya vimos la pena de acabar con las lacras", si con Fuji reverdecieron todas las lacras habidas y por haber, él mismo fue la peor lacra de todas. Tas cagando fuera del guater... piensa un poquito antes de escribir tonterías. Lo único cierto ahorita es que tu ídolo el ponja está pagando todos los crímenes que cometió y va a morir en canadá.

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